Nuevamente, asistimos a un aniversario del fallo “Mendoza”, la sentencia ambiental que ordenó la recomposición de la Cuenca Matanza-Riachuelo. A 13 años de este suceso, no podemos celebrar grandes avances. Sin embargo, desde FARN decidimos recibir este aniversario sin resignación, porque sabemos que únicamente con una participación ciudadana activa se podrán lograr mejoras para la Cuenca y sus habitantes.
Al vislumbrar el accionar del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), de las autoridades de la Provincia de Buenos Aires y del Estado Nacional, se puede concluir que los resultados del fallo Mendoza son, al día de hoy, altamente insuficientes. Mientras que el Gobierno de la Ciudad desarma las agencias encargadas del Riachuelo, diluyendo las responsabilidades, el Gobierno Nacional licita y otorga permisos para realizar obras que destruyen los humedales de la Cuenca, la única herramienta para limpiar el río y contener inundaciones.
Cómo si esto fuera poco, la Auditoría General de la Nación informó que hay serias irregularidades en el manejo de fondos de la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) y la Sindicatura General de la Nación notificó que esta misma situación se da en el manejo de fondos de las obras del Sistema Riachuelo.
Tal cómo destacamos desde FARN en años anteriores, ACUMAR no logró cumplir con la finalidad para la que fue creada. El juzgado que controla la ejecución de contratos vinculados a la Cuenca, actualmente subrogado por el juez Sebastián Casanello, destacó que hay graves inconsistencias en el manejo de los fondos para las obras de saneamiento que ACUMAR le otorga a los municipios.
La falta del accionar correspondiente por parte de las autoridades para recomponer la Cuenca Matanza-Riachuelo, se vuelve cada vez más inadmisible en este contexto. La pandemia del Covid-19 agravó las condiciones de vida de la población de la zona: los problemas ambientales y la urbanización precaria, hicieron que la Cuenca sea el epicentro de la crisis sanitaria.
Las obras inconclusas de AySA y demás responsables de llevar la red de agua potable a la región, la priorización de los negocios por sobre la justicia social y la falta de conciencia ambiental de los gobiernos son deudas pendientes que se tornan urgentes en la coyuntura actual.
Aunque el panorama de recomposición de la Cuenca no resulte esperanzador, desde FARN seguimos apostando a la institucionalidad y la participación ciudadana. Tal como lo destacamos en el aniversario pasado, si bien los avances no fueron suficientes, apenas se dictó la sentencia se consiguieron logros importantes. Teniendo en cuenta esta cuestión, FARN se encuentra desarrollando junto al Centro de Investigaciones para la Transformación (CENIT) y la comunidad de la Cuenca una plataforma online para generar información desde el territorio, buscando impulsar el involucramiento de la sociedad civil en la causa. Si querés participar del proceso de diseño de la plataforma, ¡podés escribinos a info@farn.org.ar!