Una hembra de yaguareté (Panthera onca), preñada de dos cachorros, fue atropellada ayer en la Ruta Provincial 19, dentro del Parque Provincial Urugua-i, a unos 38 km del casco urbano de la localidad de Wanda.
Según reportes periodísticos, la yaguareté fue atropellada por un ciudadano domiciliado en la ciudad de Posadas a bordo de una Ford Ecosport. La camioneta quedó retenida e intervino la División Criminalística de la Policía de Misiones para determinar las circunstancias del hecho y la velocidad de circulación del vehículo.
La situación del yaguareté en nuestro país es crítica. Se estima que quedan menos de 250 ejemplares en el norte argentino. De ellos, unos 89 habitan en Misiones. El yaguareté es Monumento Natural Nacional y Monumento Natural Provincial en Misiones, Chaco y Salta.
Ante este grave escenario, cada ejemplar de yaguareté es único. Sin embargo, las autoridades competentes han mostrado una total inoperancia a la hora de consensuar y disponer las medidas necesarias para prevenir estos tristes sucesos. Existen numerosas propuestas para la reducción de las velocidades, reclamos de sociedad civil fundamentados en informes contundentes y tristes precedentes de yaguaretés atropellados en estos últimos años.
El atropellamiento en rutas se ha convertido en una de las principales amenazas para el yaguareté, y para la fauna silvestre en general en Argentina. Unos 3000 animales silvestres son atropellados cada año en rutas misioneras que atraviesan o bordean áreas naturales protegidas.
Se trata de una situación inaceptable que debe detenerse de inmediato. Los impactos de los atropellamientos se pueden mitigar con medidas como reductores de velocidad, adecuadas señalizaciones, pasafaunas y ecoductos, entre otras, acompañadas de férreos controles y sanciones ejemplares a quienes quebranten las normas. Se trata de medidas indispensables y posibles en el corto plazo.
La salvaguarda del yaguareté es responsabilidad de todos. Los ciudadanos debemos acatar las velocidades máximas en rutas. Por su parte, la Administración de Parques Nacionales, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Vialidad Nacional y las autoridades provinciales homólogas, así como fuerzas de seguridad y Poder Judicial, deben actuar de inmediato o el yaguareté pasará a ser muy pronto sólo un recuerdo en la Argentina.