En Chubut, nuevamente, las autoridades intentan abrirle la puerta a la megaminería. En la primera sesión legislativa del año, el parlamento provincial pretendió tratar el proyecto de zonificación minera, pero la voz del pueblo que viene diciendo “No a la mina” se hizo escuchar y la sesión fue suspendida.
El proyecto de ley 128-20 Desarrollo Industrial Minero Metalífero Sustentable de la Provincia Del Chubut, permitiría la megaminería metalífera en los Departamentos de Gastre y Telsen, una actividad que, hasta el momento, está prohibida en la provincia por Ley provincial XVII-N° 68 (ex Ley 5001).
Con esta iniciativa, las autoridades provinciales no solo están ignorando a las numerosas expresiones populares que desde hace años vienen expresando la falta de licencia social sobre la actividad minera, sino también a los estudios científicos (CCT CONICET-CENPAT) que señalan que la minería podría amenazar el abastecimiento y la calidad de agua, un recurso escaso en una provincia que atraviesa una situación de estrés hídrico y desertificación creciente.
En noviembre de 2020, el gobernador Arcioni presentó el proyecto de zonificación minera, el cual pretendió tratarse en una sesión extraordinaria en el mes de febrero. Sin embargo, esta fue suspendida por no tener dictamen de la Comisión de Receso. Asimismo, la justicia provincial había ordenado la suspensión del tratamiento del proyecto de ley, hasta que no se resolviese si cumplía con los requisitos constitucionales, sin embargo, tan solo una semana más tarde, la justicia rechazó el pedido de inconstitucionalidad.
Esta vez, el proyecto de zonificación obtuvo dictamen de la Comisión de Recursos Naturales y prontamente fue incluido en la orden del día para la sesión legislativa del día siguiente, la primera sesión del año. En respuesta a estos hechos, se dieron numerosas manifestaciones populares en defensa del ambiente, que llevaron a los legisladores a suspender la sesión. Sin embargo, el proyecto aún se mantiene firme y podría tratarse en próximas sesiones.
Todo esto sucedió al calor de la oposición ciudadana que se manifestó no únicamente en las calles contra del proyecto de zonificación, sino a través del impulso de una iniciativa popular que tiene como objetivo regular la actividad minera en sus aspectos más contaminantes. Es la segunda vez que el pueblo de Chubut presenta una iniciativa de estas características, pero estos proyectos nunca fueron tratados por la legislatura.
La situación que está atravesando Chubut es sumamente preocupante. Desde FARN recordamos que la megaminería a cielo abierto trae efectos sumamente nocivos para el ambiente y la salud de las poblaciones.
En caso de que se debata la zonificación minera, la discusión debe darse en el marco de un debate público amplio, con la participación de todos los sectores involucrados y potencialmente afectados, respetando la consulta a las comunidades indígenas, los derechos de libertad de expresión, participación y acceso a la información, cumpliendo con lo establecido por la Ley General de Ambiente N°25.675 y el Convenio 169 de la OIT.