A casi 11 años del Fallo Mendoza, existen todavía numerosas cuestiones que requieren ser atendidas e implementadas, para lo cual es necesario contar con definiciones claras de los caminos a seguir y sostener esas metas con una fuerte voluntad y compromiso por parte de las diversas jurisdicciones involucradas.
Entre las acciones pendientes se destacan las siguientes:
- Establecer un régimen de control de vertidos de líquidos industriales, y la urgente modificación de la legislación que lo rige.
- Generar un sistema unificado para la habilitación de industrias, principalmente aquellas con más alto índice de complejidad ambiental y las situadas en zonas de riesgo.
- Implementar un plan para la erradicación de basurales ilegales de la cuenca, estableciendo las responsabilidades que corresponden a cada uno de los municipios en los cuales se encuentran situados; como así también la remediación de los pasivos ambientales existentes.
- Avanzar de manera sostenida con la relocalización de las familias situadas en el borde del río y las zonas de alto riesgo socioambiental.
- Desarrollar un plan integral para la gestión de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), con acciones específicas para las etapas de generación; disposición inicial; recolección domiciliaria y diferenciada; transporte, y disposición final de residuos, tomando especialmente en cuenta las recomendaciones efectuadas por el Cuerpo Colegiado.
- Elaborar un estudio integral de riesgo para el Polo Petroquímico de Dock Sud que prevea su relocalización.
- Implementar un plan de ordenamiento ambiental del territorio que defina los usos y el destino que tendrá la Cuenca.