La organización Basta de Demoler y la reconocida paisajista Sonia Berjman fueron demandados por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por «daños y perjuicios» con inhibición general de bienes por $ 24 millones por la causa iniciada en su momento para detener la destrucción de la Plaza Intendente Alvear en Recoleta, cuando se pretendía construir una estación de subte de la Línea H en ese terreno. La obra estaba suspendida por la medida cautelar dispuesta por el Juzgado Contencioso Administrativo y Tributario N°10 de la Ciudad, debido a que violaba normativa vigente.
En la presentación realizada por FARN se remarcó la amplia legitimación que otorga la normativa vigente para la defensa del derecho al ambiente sano, así como la gratuidad de la acción de amparo.
En ese sentido, el amparo presentado por los ahora demandados buscaba a vigencia del derecho al ambiente sano. Su objetivo fue, únicamente, proteger uno de los escasos y necesarios espacios verdes que necesita una metrópoli del tamaño de la Ciudad de Buenos Aires, que se encontraba especialmente protegido.
Se resaltó que la acción interpuesta por el Gobierno poseía efecto intimidatorio ya que parece ilógico e irracional el intento de sancionar a quien buscaba justamente velar por la protección del ambiente de acuerdo a la normativa vigente/ley.